
Hamás ha rechazado formalmente las acusaciones de crímenes de guerra, que figuran en el informe de la ONU del Juez Goldstone.
En su documento, una respuesta de 52 páginas, aseguró que los 3 ciudadanos civiles muertos por los cohetes Oruga disparados durante la operación "Plomo fundido" fueron "un accidente.
(Guysen.International.News)